Este mármol destaca por su elegancia atemporal. Su tono gris oscuro, casi antracita, envuelve los espacios con un aire contemporáneo y sobrio. Las delicadas vetas blancas, que se entrelazan suavemente en patrones irregulares, añaden un toque de movimiento y contraste que realza su belleza natural.
Es un material ideal para quienes buscan una combinación perfecta entre modernidad y lujo, siendo ideal para encimeras, revestimientos o suelos que quieran transmitir estilo y serenidad.